jueves, 10 de julio de 2008

Con ganas de volar antes de aprender a caminar...

Y después que?? Una frase muy clásica en mí… para ser lo desorganizada que puedo llegar a ser para algunas cosas, no puedo evitar pensar en los varios posibles desenlaces de una misma situación cuando se me presenta. Si empiezo a estudiar…pienso cómo sería terminar la carrera (con huevos y harina incluidos) Empezar un trabajo solo me hace pensar en cuenta regresiva cuanto falta para hacer el último punto (en verdad, creo que pierdo más tiempo calculando cuanto requiere hacer cada punto que verdaderamente haciéndolos) y ni hablar en una posible relación donde una instantánea ansiedad me hace desequilibrar los sentidos (ojo!! Manteniendo siempre la cara de póquer) y ahí al mejor estilo “elige tu propia aventura” salgo a imaginarme que si va a salir todo bien podría ser de tal o cuál manera y si llegara a salir mal… Que desastre!! Y ahora que hacemos con los amigos en común que claro, todavía no tenemos…pero y si los llegáramos a tener!!
Y claro está… Tanta estadística me hace ir en vicio y tanto pensar en probabilidades especulativas de todo tipo genera que finalmente: no empiece nada… imagínense! Después de tanto strees previo quedo agotada y ni ganas me dan… Lo más curioso de todo esto resulta ser que cuanto más planeo las cosas peor salen!! Pero sigo sin aprender del error y leo la última pagina del libro mientras todavía no termine el prologo… y dicen que de tanto vivir pensando en el mañana uno no disfruta lo que le pasa en el presente…y saben? Creo que esto puede ser muy cierto… así que quizás por una vez (por lo menos por una) voy a intentar que me vaya mal en el final de la última materia de alguna carrera, no voy a hacer el trabajo a tiempo, me va a dejar algún novio y ni hablar de la manera en la que me va a decepcionar el final de ese libro después de 500 hojas!! Pero por una vez… la única posibilidad va a ser dejarlo ganar al azar... y mientras tanto disfrutar el durantes…

miércoles, 2 de julio de 2008

De ese agua nunca he de beber…pero aquella cerveza podría andar…

Por qué a un pobre tipo que después de tantos años de peleas y machismo desmesurado supo ganarse su apodo de “el oso” tiene que venir una desgraciada a designarlo con cosas como “gordi, bichi, amorci...” y encima esperar a que se junten todos sus amigos a ver el partido en la casa para gritárselo orgullosa!! De hecho, en algunos casos emiten sonidos extraños con los que uno no termina de entender si están queriendo llamarlo o alguien les está pisando un pie!! Si existiera en el diccionario… “munsfuchi” supongo que diría algo así como: Adj. (masc?) onomatopeya moralmente reprochable y lingüísticamente dañosa utilizada por toda clase de mujeres hormonalmente afectadas para designar a sus respectivos novios (si... el parecido con la definición de delito no es casual…)
Ahora… peor aún cuando los hombres influenciados por la misma movida (o para poder obtenerla?) toman esa misma actitud…así ves a un gordo, con barba y tatuajes diciendo “cuchi… te parece bien esto?” nooo chicos!! Que el hecho que el corrector ortográfico me halla marcado todas esas palabras no es casualidad!!
Pero ya saben, parte de mis relatos siempre tienen que ver con un mea culpa… y la realidad es que remontándome algunos años atrás recuerdo haberle dicho a mi hermana, quién es una gran experta en la utilización de todo este tipo de vocablos, que si alguna vez me veía hablando así por Dios que alguien me matara… y bastó con que me ponga de novia para tener a toda una muchedumbre iracunda tras mis pasos!! Siii! Después de años de burlas y miradas de desprecio caí en la misma actitud!! Así que quizás por hoy asuma (pero solo si me guardan el secreto…) que a todos, aunque reneguemos de ello… nos encantan esas cursilerías de San Valentín… o no mis chuchiss?